Mientras la ministra de Salud, Graciela Ocaña, dice que el aborto es tema de "política criminal", la presidenta Cristina Fernández está en contra de promulgar este derecho, y la oposición patronal es clerical y retrógrada, como el macrismo que mediante maniobras, intenta evitar el debate Legislativo sobre la reglamentació n de los abortos no punibles en la Ciudad.
Todo el arco político gobernante y la iglesia, que cínicamente se dicen defensores de la vida, con estas políticas provocan el aumento de enfermedades de transmisión sexual letales y son los promotores de la clandestinidad del aborto que mata fundamentalmente mujeres trabajadoras y pobres.
Mira la nota completa, al haberse cumplido un nuevo aniversario de la campaña latinoamerciana y del Caribe por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.
http://www.pyr.org.ar/spip.php?article505
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